El Estado Panameño debe ser completamente Laico, para atender de manera independiente las necesidades de la población. Instancias accesibles y capacitadas, con más recursos y mejor planificación para atender temas como la violencia y la protección de menores; se requiere personal capacitado en las instituciones correspondientes. La educación sexual es prioritaria para dotar tanto a los menores como a los adultos de mejores herramientas para la toma de decisiones sobre su proyecto de vida y su bienestar.
Regulación de derechos, cónsona con la realidad y las necesidades de todos los individuos que conforman el Estado.